Lo único que Merkel tiene para celebrar es que die panzers han pasado a semifinales en el Mundial de Sudáfrica.La conducción del gobierno alemán no convence al interior de su nación: de acuerdo con una encuesta llevada adelante por la televisión pública de aquel país, el 77% del pueblo alemán piensa que Angela Merkel no logra manejar el gobierno de la nación germana.
La pérdida de autoridad por parte de la mandataria pudo observarse en las elecciones a presidente de la última semana. El candidato de Merkel, Christian Wulff, fue elegido como presidente federal sólo en una tercera vuelta entre los miembros de la Asamblea Federal; dado que en los dos intentos previos los representantes de la Bundesversammlung no lograron consolidar su elección respecto de un único candidato.
Esta dificultad de imponer al democristiano como jefe de Estado revela la debilidad en la cual está inmersa el gobierno de coalición que sostiene a la Canciller. Es indiscutible que la alianza de gobierno formada por los democristianos de Merkel y los liberales está en crisis.
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